El Presidente estadounidense, quien abandonó un acuerdo nuclear con Teherán a pesar del cumplimiento documentado de ese país, dijo que se reuniría con su homólogo Hassan Rouhani sin condiciones previas tan pronto como el líder iraní acordara hacerlo.
De acuerdo al mandatario, una reunión suya con líderes de Irán no sería un signo de debilidad o de fortaleza, sino "lo apropiado" para tratar de obtener algo mejor que lo que su predecesor Barack Obama logró con el Acuerdo Nuclear de Irán. Prueben con el respeto: hacia los iraníes y los compromisos (internacionales), aconsejó.
Además, la administración de Trump también está presionando a los compradores de petróleo para que dejen de comprar crudo de Irán, el quinto mayor productor de petróleo del mundo, antes del 4 de noviembre.
Después de un cruce de amenazas con Irán, Donald Trump abrió ayer la puerta al diálogo.
Respecto a las negociaciones con Europa sobre el acuerdo nuclear entre Irán y las grandes potencias, Qasemi mencionó que se han dado algunos pasos y se están estudiando los detalles restantes.
Hemos estado muy ocupados en los últimos tiempos. Tienen razón, si yo vendo esos cuchillos (señalándolos), ya no podré comprar más, destaca.
En las calles de Teherán, la gente piensa más en los problemas económicos, sobre todo en la crisis monetaria, después de que el rial perdiera dos tercios de su valor frente al dólar desde principios de año. "Son gente que infringe los acuerdos sobre Irán aprobados por el Consejo de Seguridad de la ONU. ¿Por qué motivo tenemos que confiar en ellos y negociar?", preguntó el asesor.
Unas horas más tarde, el canciller iraní, Mohammad Javad Zarif, replicó, también en Twitter y con mayúsculas: "NO ESTAMOS IMPRESIONADOS".
Hace sólo una semana, Rohani y Trump mantuvieron un intercambio muy tenso.
La semana pasada, Trump respondió enojado a Rouhani, quien había advertido anteriormente sobre las consecuencias de un conflicto con su país.
Washington ha exigido a Irán limitar su programa atómico durante una duración superior a la estipulada en el JCPOA, y poner fin a sus misiles balísticos y a su influencia regional.